Happy Pediatric Dentistry se dedica a proporcionar la mejor calidad de tratamiento para los dientes de los niños. La reacción del niño a sus experiencias dentales puede dejar huella —una experiencia positiva ayudará a que el niño se sienta confiado al ir al dentista. Algunos niños podrían no ser capaces de cooperar, debido a su corta edad, al miedo o incapacidad de lidiar con los tratamientos dentales, o bien podrían moverse incontroladamente lo que posiblemente podría terminar en una lesión. Otros podrían desarrollar un miedo tal que se les dificultaría cooperar en consultas futuras o incluso rechazar el tratamiento. Estos niños podrían sentirse más cómodos y seguros con la sedación.

• Óxido nitroso. También conocido como gas de la risa, el gas nitroso es un sedante muy seguro que permite que un niño levemente nervioso se calme mientras está despierto y habla con el dentista. Se coloca una mascarilla sobre el rostro del niño y a medida que respira, el niño se relaja. Sus efectos se disipan rápidamente cuando se apaga el gas.
   
• Sedación oral consciente. Si el nivel de ansiedad del niño no baja con el gas nitroso, el uso de la sedación consciente lo hará sentirse aletargado. Según el tratamiento que se necesite y la capacidad del niño de cooperar, disponemos de diferentes medicamentos de sedación consciente. Generalmente, se utiliza para los tratamientos más largos que llevan más trabajo y que pueden causar tensión y molestia al paciente. Entre los efectos secundarios están la náusea y el vómito. Estos se pueden minimizar siguiendo indicaciones de comidas y bebidas específicas antes y después de la sedación.